Pasa a ser real
Hoy voy a hablar sobre el miedo, esta
emoción que tanto nos puede limitar en nuestro desarrollo emocional. Está claro
que toda emoción tiene su función a nivel biológico. Y a nivel muy básico la biología
utiliza ciertas emociones para la supervivencia. El miedo en estos casos nos
puede ayudar ante un peligro a evitarlo, huir o afrontarlo. Pero ahora bien, ¿qué
es realmente un peligro? Es aquí donde juega la subjetividad, las creencias y
experiencias de cada uno. Es justo aquí donde esta emoción nos puede limitar
bastante. Ya que aparentemente en muchas ocasiones donde aparentemente no hay
peligro, hay personas que viven grandes experiencias de miedo (ataques de
ansiedad, miedo a hablar en público, miedo a lugares cerrados, miedo a la
oscuridad, miedo a ser abandonado, a quedarse solo, a perder el trabajo, etc…
Por experiencia propia y por lo que he
podido ir viendo a lo largo de los años, cada persona al llegar a este mundo,
venimos con una serie de miedos patológicos, que a lo largo de la vida van
apareciendo. Miedo patológico me refiero a reacciones de miedo ante una
situación aparentemente normal y que la persona en cuestión a haya vivido
anteriormente una experiencia similar estresante que pueda ser la causante de
este miedo. Voy a poder varios ejemplos: Tener miedo al agua y nunca haber
tenido una experiencia mala relacionada con el agua. Tener miedo en una relación
a ser dejado, cuando anteriormente nunca haya ocurrido algo similar. Yo de
pequeño cuando uno de mis padres se había marchado, me pasaba muchos ratos
mirando por la ventana angustiado, y con miedo de que le hubiera pasado algo.
Anteriormente que yo recuerde nunca habían tenido ningún accidente que hubiera
creado esa angustia. Y yo me pregunto, ¿qué podría hacer que yo de pequeño
estuviera sufriendo en vez de jugar tranquilamente disfrutando del momento
hasta que llegaran mis padres?
Hay una serie de miedos, que sin causa
aparente aparecen en nuestras mentes. Estos son los más limitantes, ya que no
conocemos su causa y por lo tanto no sabemos como trascenderlos. El error ya
sea por educación o creencias es que nos llegamos ha asociar tanto a esta forma
de pensar, a estos miedos que se encuentran en nuestra mente que pensamos que
somos así y que no podemos cambiar.
En esta área es donde quiero
profundizar con los nuevos descubrimientos de la ciencia y relacionarlos
exactamente aquí, con estos miedos patológicos. Les llamo miedos patológicos porque
la causa no se encuentra en la vida contemporánea, es decir, des del nacimiento
hasta la actualidad. Gracias a muchos científicos como Anne Schützenberger han
descubierto una fuerte relación con estos miedos patológicos y nuestros
antepasados. Una experiencia traumática que haya vivido un abuelo o tatarabuelo
con el agua, puede influenciar directamente a un nieto o bisnieto aunque este
ni haya conocido a su abuelo ni conozca su historia con el agua. Esta persona podrá
vivir el agua de varias maneras, es posible que cree una fobia y no le guste el
agua, o todo lo contrario, le atraiga tanto el agua que se vuelva profesional
de la natación.
Todo juega un rol inconsciente, esta
persona piensa que por naturaleza no le gusta el agua, o lo contrario le
apasiona. Pero es inconsciente que estas emociones pueden venir de una experiencia
que tuvo un abuelo.
Estas cosas tan sutiles pueden ocurrir
en todas las áreas de nuestra vida, a nivel de pareja, una persona que ama la
fidelidad y nunca le seria infiel a su esposa, podría ser que su abuelo fuera
un Don Juan. Una persona muy ahorradora y cuidadosa con el dinero, podría ser
que un abuelo lo hubiera perdido todo en el juego. Una persona que no bebe nada
de alcohol, o le apasiona el alcohol y se vuelve sumiller, podría ser que un
abuelo fuera alcohólico. Es como un ciclo que no se ha cerrado y se tiene que
reparar.
Todo esto podría explicar la avaricia,
el rencor, la desconfianza, el comer en exceso, el miedo a no llegar a final de
mes, el miedo a la oscuridad, al campo, a los trabajos duros, miedo a ser
robados. Todos estos sentimientos que nos limitan en nuestra vida día a día.
Si miramos atrás en nuestra historia y
vemos todas las guerras que nuestros países han pasado, todas las penumbras,
épocas de hambre, traiciones, robos, accidentes, enfermedades, etc.
Es en toda nuestra historia donde se
encuentra anclada nuestra infelicidad esperando algún día a ser perdonada.
He empezado con el título: Cuando el
miedo se complementa pasa a ser real.
¿Qué quiero decir con esto?
Que el miedo primero aparece en
nuestra mente, es entonces cuando nos asociamos a este miedo y le prestamos
atención que nuestra vida va a materializar experiencias de este calibre (miedo
al agua, viviremos un susto con el agua, miedo a ser robados, llegara un día
que nos robaran, miedo a ser abandonados, encontraremos una pareja que nos
acabara dejando). La vida es abundancia, y nos acaba trayendo lo que pedimos,
si estamos pidiendo miedo nos traerá experiencias de miedo.
Es entonces, cuando llega la
experiencia que el miedo se vuelve real, y es cuando decimos, ves tenía razón, el
agua es muy peligrosa, el mundo es inseguro, o todas las mujeres/hombres son
iguales, no se puede confiar en nadie.
No nos damos cuenta que nosotros
mismos estamos creando nuestra realidad.
La toma de consciencia, el perdón y el
amor por la vida es lo que nos acabara haciendo libres.
el miedo que primero aparece en nuestra mente, ¿De donde sale?
ResponEliminano es mejor reparar/perdonar desde la raiz?
(espero que no se duplique...XD)
De la creencia que estamos separados de la fuente.
ResponEliminaLa raíz es uno mismo. Cualquier esperanza de perdón des del exterior es solo seguir con la separación