En busca de la felicidad

¿Hasta que punto estarías dispuesto a cuestionarte tus placeres para encontrar la felicidad?

Enric Corbera en una de sus conferencias dijo, "si para encontrar la paz interior (felicidad) tengo que ir al infierno y hablar con el mismo Belcebú, allí iría". En su momento no acababa de entender que quería decir con esto. Ahora con el tema que voy a tratar en este blog esta frase me cobra total coherencia.

¿Que nos esta transmitiendo esta frase?

La fuerza de voluntad que tiene para llegar a encontrar la felicidad, la falta de miedo por afrentar nuestros grandes temores. Ya que los miedos son el freno a la paz interor, esta es una gran actitud para la búsqueda de la felicidad.

El grado de miedo o duda que le pongas, estará nublando el camino hacia el objetivo.

Ahora bien no solo el miedo y la duda es lo que nos ciega la felicidad. Son nuestras creencias las grandes limitadoras.

Es fácil buscar la felicidad allí donde obtenemos placer e intentamos evitar cualquier dolor. Bien, a nivel personal la practica de deportes, tal como deportes de aventura y viajar me produce placer y satisfacción. Le he dado bastante prioridad a estas actividades, pero me he dado cuenta que la felicidad es algo que trasciende a todo lo mundano. Ya que con el tiempo me he dado cuenta que refugiarte en los placeres a la larga no sirve de nada. Estamos negando una parte de la balanza igual de importante. Realmente si nos refugiamos en los placeres es porque hay un vacío en nuestro interior. ¿Muchas veces me he preguntado en la historia cuando se inventaría el turismo? la necesidad de viajar a la otra parte del mundo para ver cosas “bonitas” o lo contrario, vamos a la otra parte del mundo a ver pobreza. O gente que buscamos cada vez mas retos, el viaje más lejano, más exótico, subir a la montaña más alta, vamos historias mil. A nivel personal hay una cierta satisfacción entremezclada de sufrimiento de pensar si lo voy a lograr o no, si finalmente cubrirá mis expectativas, si me lo pasaré bien, etc. Estar a este nivel, es entrar a un callejón sin salida, donde nos encontramos directamente expuestos a la depresión y la ansiedad. Hay que hacer un cambio de conciencia para ver las cosas de otra manera. Y que yo sepa ni la medicina, ni el Reiki, ni la medicina china, etc… puede cambiar tu conciencia. Depende solo de nosotros mismos.

El mundo esta lleno de romanticismos, y los romanticismos no dejan de ser una mezcla de placer y sufrimiento donde no sabemos ni donde empieza uno ni donde termina el otro. Como dice Enric Corbera: lo siento pero me voy a cargar todos los romanticismos. Y estoy completamente de acuerdo si uno quiere estar verdaderamente dispuesto a buscar la felicidad.

Un curso de Milagros nos dice que no sabemos diferenciar entre dolor y placer y que bueno cada uno lo atribuye a su manera. Solo hace falta ver el mundo con relación a esto. Yo no lo llevaría mucho más lejos de llamarle esquizofrenia global. Nos pasamos toda una vida queriendo evitar el dolor y no nos damos cuenta que con esta actitud siempre nos encontramos nadando en la piscina del sufrimiento.

En que nos limitan los romanticismos.

Bueno pues por ejemplo en encontrar placer en trabajar. Es como que si uno no trabaja duro físicamente y acaba el día reventado no se siente satisfecho. Esto a muchos niveles (físico, mental, productivo, etc) Yo me siento a veces identificado con el físico, supongo que también por eso me atraen bastante los deportes. y los trabajos físicos.

Voy a poner un ejemplo: Yo practico la espeleologia, un deporte donde normalmente tienes que arrastrarte, cargar con bastante peso, pasar muchas horas dentro de una cueva, pasar frío, mojarte, salir con morados y si digo la verdad a sido uno de los deportes que más placer me ha dado. Parece paradójico, verdad? Bueno pues habrá gente que piensa que es una locura, y hay gente que piensa que quedarse en casa el fin de semana descansando, o ir al centro comercial es otra locura.

También se le llega a dar valor por ejemplo al dinero o las cosas ganadas con sudor. Muchas han sido las veces que he escuchado, he incluso he llegado a decir: que cuando una cosa no cuesta nada en conseguir no se valora lo suficiente. Ahora me estoy dando cuenta que detrás se esconde una creencia de escasez.

Y realmente es muy difícil llegar a la felicidad por estos caminos. Ya que no se llegan a valorar otros puntos de vista, se entra en conflicto con otras ideas, en definitiva con uno mismo. Estas creencias me han llevado a encontrarme deprimido cuando no tengo planes o actividades que hacer, y casi siempre a ver que no hago lo suficiente ni lo suficientemente bien.

Vuelvo a preguntar, ¿Estamos realmente dispuestos a cuestionarnos nuestros placeres para encontrar la felicidad?

Mira si llego a confiar poco en mi mismo, y estoy pendiente de que dicen los demás al respecto que hay veces que me dicen: Alégrate, muestra entusiasmo por ejemplo en mi cumpleaños, al aprobar un examen, al sacarme el carne de conducir… que me he llegado a sentir culpable porque no me excitaba lo suficiente por los cosas, lo cual me ha llevado a ser falso (mostrar apariencias que no siento), y en definitiva a sentirme mal.

Bueno es lo que aprendemos des de pequeños, dar las gracias y poner cara sonriente. No habré visto veces a padres reñir a sus hijos por no decir las gracias por un regalo.

Esto lo estoy vivenciando ahora en primera persona a gran escala. Estoy haciendo de profesor en China, y no veas que palizas de currar que los profesores nos damos para encuadrar a cada niño al sistema establecido. ¿Donde os pensáis que los niños pierden la vitalidad de reír, chillar, correr, saltar, imaginar?

Mi experiencia es la siguiente: Para que “aprendan” ingles en una clase de 30 niños de entre 7-8 años a parte de un pequeño grupo de alumnos normalmente hay que poner presión, y se hace normalmente a través del “miedo” >Alzando la voz, mostrando que tu eres el maestro y ellos los alumnos, a través de castigos, que tienen que hacer lo que tu dices, etc…< Si intentas hacer la clase sin esta presión, poniéndote a la par de ellos, ni los que tenían ganas de aprender escuchan jejeje, vuelve una energía en la clase que personalmente da “miedo”

Así que lo de profesor no es lo mío

Esto ultimo he alucinado con mi experiencia, donde no deja de ser mi propia realidad,(la influencia de cada profesor sobre los alumnos, edad, numero de alumnos en clase, según el día, el tiempo, el país, el estatus social) hay tantas variables al respecto que mejor no os creáis como verdad lo que acabo de explicar de mi experiencia. Posiblemente mañana lo veo de manera diferente.

Ya que por ejemplo después de haber dado una clase donde mis alumnos estaban súper revueltos, miras la siguiente clase con otro profesor y los veo a todos callados. La primera reacción fue decir: Míralos, la madre que los parió, hace un rato no había tu tía que me quisieran escuchar y ahora todos escuchando. A lo que me llevo a mi realidad, a mi mismo. A recordar que nuestra condición externa, es nuestra condición interna. Soy yo el que tiene que cambiar de mentalidad.

Aprendizaje:

Tener fuerza de voluntad y fe en nuestra búsqueda

Ver las situaciones de una manera integral, sin dejarse llevar por romanticismos, placeres o dolores. Un cambio de conciencia es clave para ver la situación de otra manera